El reino del Arco Iris

Este cuento fue de los primeros que me animé a escribir tras muchos años sin "garabatear" en un papel. En un arranque de "ego", pensé que le faltan unas ilustraciones que dieran vida a las palabras.

Érase una vez, tres colores.

Tres colores que vivían en tres reinos distintos, tres reinos vecinos. Se llamaban Color Rojo, Color Azul y Color Amarillo. Eran colores, alegres, felices, que vivían iluminando los días de sus reinos y llenándolos de color. Daban vida a las flores, a las frutas, al cielo y a la tierra, pero ninguno de ellos conocía la existencia de los otros reinos ni de los otros colores, así que todas las cosas a su alrededor eran del mismo color.

Cierto día el Color Rojo, paseando por la frontera, pensando como colorear las cerezas que empezaban a nacer en los campos, se despistó y no se dio cuenta de que cruzaba la frontera de su reino. Casualmente el Color Amarillo también se encontraba por los alrededores. Estaba coloreando unas flores que había plantado junto a una valla nueva, que servía para marcar los límites de su casa. Así que Color Rojo y Color Amarillo, sin saberlo, perdidos en sus pensamientos y en sus quehaceres, chocaron. Del choque, se produjo un pequeño estallido y surgió un nuevo color, el Color Naranja. Los dos Colores, aturdidos, no podían creer lo que estaban viendo. El naranja había bañado las flores y ahora eran de un tono tan bonito, perfecto para ellas, tan luminoso. Así que Color Rojo y Color Amarillo se hicieron amigos, visitaron sus respectivos reinos y salpicaron de nuevos colores a las cosas. Una vez pasado el tiempo, siendo ya muy amigos, pensaron que si ellos se habían encontrado quizás pudiera haber más colores alrededor sin que ellos lo supieran. Decidieron emprender un viaje para averiguarlo, contentos por la aventura que se avecinaba.

Como ya os podéis imaginar no tuvieron que ir muy lejos. No fue difícil encontrar el reino del Color Azul, (os recuerdo que eran vecinos). Cuando lo encontraron y Color Azul se repuso de la sorpresa de ver a sus visitantes y de ver cómo aparecía el naranja en su vida, no dudo ni un segundo en aceptar mezclarse para ver qué sucedía. Chocó con Color Amarillo y salió un verde precioso, que daba un tono totalmente fresco a los campos y a las hojas. Y aun quedaron más fascinados tras el choque entre Color Azul y Color Rojo, del que surgió un violeta.

Y tan contentos estaban los tres nuevos amigos, que no podían dejar de chocar para ver los destellos de los colores que salían. Y entre rojos, amarillos, azules, naranjas, verdes y violetas crearon un arco iris perfecto. Tan enorme que unió los tres reinos y bañó de colores todas y cada una de los elementos que formaban parte de sus territorios.

Decidieron unirse y denominarse “el Reino del Arco Iris” pues simplemente les pareció que a partir de entonces las cosas iban a cambiar en el mundo del color.